Jornada muy complicada en nuestra visita al río Órbigo. El día estaba bastante revuelto, muy nublado en muchos momentos que podría haber compensado algo el bajo caudal del río... Pero no.
Últimamente los días muy soleados han dificultado mucho la pesca por culpa también de los bajos caudales, en esta ocasión acudimos al río con un cielo bastante encapotado en las primeras horas del día pero con una temperatura bastante aceptable. Eso sí, los ríos siguen cortos y poco habrán medrado a pesar de las lluvias de estos días.
Comenzamos pescando con pequeñas ninfas y perdigones con los que no conseguimos absolutamente nada, buenas tiradas que no daban ni picada. Terminamos pescando incluso con ninfas montadas en un 20... Fue poco antes de ir a comer cuando Jesús conseguía una truchilla en una rasera tras mucho insistir.
Comimos pronto, sobre las 13:00, para probar suerte en los momentos de mayor temperatura del día. Ambos montamos las cañas de seca y nos pusimos a pescar ante una eclosión bastante precaria de diferentes tipos de efémeras, se pudieron ver algunos pardones, rhodani y otras más pequeñas de color claro. En las zonas de aguas más movidas cero actividad, llegamos entonces a una tabla muy lenta donde observamos varias cebadas de buenas truchas.
Comían bajo las ramas, zona con mucha protección y de lance muy muy complicado. Tras probar con el tándem que llevaba, Jesús me recomendó poner una pequeña emergente en culo de pato, a todo esto las truchas seguían comiendo a 10 m de nuestra posición algo que bajaba muy placado. Solo había sitio para una caña e intentando afinar un poco el lance ¡zas!, enganchón de la mosca en las ramas de atrás... Decidimos no movernos y dejar el hilo enganchado; Jesús me deja entonces su caña ya preparada también con una pequeña emergente algo más clara. Resultaba muy complicado ver la mosca debido a la cantidad de pelusa y suciedad que el aire tiraba al río. Con la nueva mosca lanzo, y ya no sé si a la primera o a la segunda, la trucha se descuelga para comer franca la imitación. Clavada y ratillo de lucha calmada para no armar alboroto, hacía mucho que no sacaba una trucha tan buena a seca y sobretodo en aguas tan paradas.
El día seguía estando complicado, empezó a soplar un fuerte viento que no dejaba de tirar ramas y llenar de pelusas todo el río, obviamente las truchas ante esa situación desaparecieron por lo que decidimos esperar un rato a ver si se tranquilizaba la cosa y alguna volvía a su sitio. Una valiente fue la que se puso a comer de nuevo a pocos metros de la anterior, era turno de Jesús y la verdad es que no tardó mucho en hacerla sucumbir ante la misma emergente que la anterior, perfecta clavada y otra preciosa trucha a la sacadera.
Aguantamos un poco más a ver si alguna seguía puesta pero ya no había absolutamente nada de mosca y el viento iba a más así que nos dimos por satisfechos y recogimos los trastos.
Comimos pronto, sobre las 13:00, para probar suerte en los momentos de mayor temperatura del día. Ambos montamos las cañas de seca y nos pusimos a pescar ante una eclosión bastante precaria de diferentes tipos de efémeras, se pudieron ver algunos pardones, rhodani y otras más pequeñas de color claro. En las zonas de aguas más movidas cero actividad, llegamos entonces a una tabla muy lenta donde observamos varias cebadas de buenas truchas.
Comían bajo las ramas, zona con mucha protección y de lance muy muy complicado. Tras probar con el tándem que llevaba, Jesús me recomendó poner una pequeña emergente en culo de pato, a todo esto las truchas seguían comiendo a 10 m de nuestra posición algo que bajaba muy placado. Solo había sitio para una caña e intentando afinar un poco el lance ¡zas!, enganchón de la mosca en las ramas de atrás... Decidimos no movernos y dejar el hilo enganchado; Jesús me deja entonces su caña ya preparada también con una pequeña emergente algo más clara. Resultaba muy complicado ver la mosca debido a la cantidad de pelusa y suciedad que el aire tiraba al río. Con la nueva mosca lanzo, y ya no sé si a la primera o a la segunda, la trucha se descuelga para comer franca la imitación. Clavada y ratillo de lucha calmada para no armar alboroto, hacía mucho que no sacaba una trucha tan buena a seca y sobretodo en aguas tan paradas.
El día seguía estando complicado, empezó a soplar un fuerte viento que no dejaba de tirar ramas y llenar de pelusas todo el río, obviamente las truchas ante esa situación desaparecieron por lo que decidimos esperar un rato a ver si se tranquilizaba la cosa y alguna volvía a su sitio. Una valiente fue la que se puso a comer de nuevo a pocos metros de la anterior, era turno de Jesús y la verdad es que no tardó mucho en hacerla sucumbir ante la misma emergente que la anterior, perfecta clavada y otra preciosa trucha a la sacadera.
Aguantamos un poco más a ver si alguna seguía puesta pero ya no había absolutamente nada de mosca y el viento iba a más así que nos dimos por satisfechos y recogimos los trastos.
Pesca muy condicionada por el bajo caudal del río, pero bueno, al menos conseguimos un par de buenas capturas en el rato que hubo actividad arriba. En algún rato me entretuve en fotografiar ninfas, la verdad que bajo las piedras era una pasada la cantidad de insectos que había, por comida no será.
Ninfa de heptagénido (Ecdyonurus sp.) |
Ninfa de heptagénido (Epeorus sp. fase clara) |
Ninfa de bétido |
Larva de tricóptero |
Larva de tricóptero (Hydropsychidae) |
pues si,algo es mucho mas que nada.Lo que noto en esa tabla es lo colmatado que está el rio.Se nota hace mucho que no ha habido un buen caudal con velocidad.Si hay algun insecto...estará mas que enterrado así no pueden sobrevivir.saludos.
ResponderEliminarEn general este tramo no está muy colmatado, salvo los parados estos que encima es donde están la mayoría de peces... También habrá comida, los quironómidos y demás mosquitos proliferan ahí y también son parte de la dieta de las truchas.
EliminarSaludos!
Vaya truchas que clavasteís, pocas pero gordas. En fin, yo tambien tengo serios problemas en cada jornada para salvar el bolo. Este año cuesta y mucho hacerlas comer.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues sí, salvo el primer día que el río bajaba con caudal aceptable el resto ha sido luchas contra el bolo, pinta mal la temporada y me da que poca lluvia va a caer por esta zona ya...
EliminarUn saludo!
Muy buenas amigos!!lastima no aver podido acabar edta jornada con alguna captura mas.pero no os quejeis que vosotros aun las veis...un saludo desde alemania!!!!!!
ResponderEliminarA ver si hay suerte y en junio podemos echar unos lances! Un abrazo!
EliminarEn las jornadas duras es cuando da más gusto triunfar.
ResponderEliminarMe alegro de hayáis sacado "oro" de esas aguas.
Saludos y enhorabuena
Gracias Josiño, ese rato salvo el día y por lo menos nos dejó un buen sabor de boca,
EliminarSaludos!
Muy finas esas fotos Mario! Las de las larvas y las ninfas preciosas.
ResponderEliminarLos ríos no están como debieran poco caudal a falta de lluvias y las aguas como una pecera, con estas condiciones de hacerlo difícil el engañarlas ya que están "vagas".
Un saludo!
Gracias Txatxangorri! Esperemos que estos días de lluvias hayan mejorado algo los ríos que falta les hace!
EliminarUn saludo!