Llegué pronto al río, lo cierto es que por las fechas que eran esperaba encontrarme ya gente por el río, pero no fue así. Todavía estaba la mañana fría y sabía que me iba a costar mover peces al principio, y así fue.
En las primeras corrientes no conseguí ninguna captura con las ninfas. Fue una vez ya con el sol en altura cuando obtuve las primeras truchas, todavía no estaban muy expuestas y había que buscarlas en sus refugios con las consecuentes bajas en la caja ya que los enganchones eran constantes. Las truchas de 30-35 cm parecían las más activas en estos momentos, muy peleonas, realmente son unos tamaños muy divertidos.
Algún tricóptero volaba ya por el río y pude ver un par de cebas, no repetían pero fue suficiente para cambiar de caña ya que a ninfa me había quedado bastante satisfecho. Me puse a pescar tranquilamente el buen tramo que tenía por delante con un trico de ciervo en parachute y un pequeño perdigón dorado en tándem. La poca mosca que aparecía eran betidos olivas y algún Epeorus.
En las zonas más rápidas las pequeñas truchas eran las que entraban al perdigón pero ninguna se decidía a tomar la seca. Llegué entonces a un tramo más lento donde pude ver una trucha de unos 35-40 cm bastante activa y bien colocada, le lancé el tándem y automáticamente fue a comer la ninfa pero únicamente conseguí revolcarla, quizá clave con demasiada precipitación.
Seguí pescando despacio esta tabla, la profundidad subió un poco al igual que la velocidad del agua; el feeling con estas aguas era muy bueno. Sin perder de vista el tricóptero señalizador, de repente un escandaloso glup que salió de la nada se tragó la mosca, clavé al momento y pude notar algo realmente desproporcionado al otro lado que me puso la caña al límite y que terminó llevándose la mosca. La tabla rápida seguía teniendo muy buena pinta así que até de nuevo un setup igual al anterior y una ninfa cobre en el rastro. Al segundo lance una truchas bastante maja tomaba la ninfa y conseguía una captura que me subía la moral tras la perdida anterior.
En un punto de estrechamiento se generaba una buena vena de agua, poco profunda, en la que tanto el tricóptero de ciervo como la ninfa podrían mover truchas,y así fue. En la primera posada la mosca se hundió bruscamente y al otro lado estaba este magnífico ejemplar con el que disfrute de una buena lucha.
Parece que era el momento de actividad, aquí y allá había alguna trucha que de vez en cuando se delataba con alguna cebada y la mayoría de ellas sucumbían a la ninfa, no tanto a la seca, pero me sirvió para tener un muy buen rato de pesca. Alguna trucha más conseguí de esta manera hasta que alcancé a un par de pescadores. Decidí terminar la jornada, esta vez sí, con un muy buen sabor de boca.
Pues muy bien que te fue y lños resultados fueron muy buenos..lastima solo una a la seca.Yo ya en Espania pesque' el otro dia por Palencia todo a seca y cebadas de truchas muy grandes y tuve mjucha fortuna ahora un par de salidas mas y a esperar la semana internacional en Leon.Un saludo Alberto. farioreo
ResponderEliminarMe alegro que hayas disfrutado, la verdad es que mis salidas están siendo bastante satisfactorias y no me da tiempo a compartirlas todas. Suerte en el Semana Internacional, saludos!!
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