Una tarde primaveral más y otra semijornada con buen sabor de boca. La poca actividad de las primeras horas, apenas movimos un par con las rhodani, se convirtió en una locura ayudada por el sol con los tricópteros. Los comía sin compasión al agua, con saltos espectaculares.
Muy bonitas, saludos
ResponderEliminarGracias David
Eliminarla ultima que te rompio tenia muy buena pinta,una lastima!
ResponderEliminarYa macho... ¿que habría salido?
EliminarLos tricos son un bocado exquisito y esas truchas muy bellas.
ResponderEliminarEnhorabuena y un saludo
Gracias Jose! Un saludo.
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