Actividad concentrada

Este fin de semana tocaba la primera visita del año a uno de los grandes de León. Hasta las orillas del río Esla nos acercamos Jesús y yo con la intención de poder disfrutar de un agradable día de pesca ya que, tanto el tiempo como el caudal, acompañarían.


Me hubiera esperado una mañana más fresca pero la verdad es que las temperaturas fueron buenas desde el principio del día. Las aguas frías de este río nos hacía pensar que nos costaría bastante sacarle alguna trucha, sobretodo al principio del día. 

Pero lo cierto es que tardamos poco en conseguir las primeras capturas, las truchas se empezaban a mostrar bastante activas en las zonas de corriente, en muy poco tiempo pudimos conseguir varías preciosas truchas.

Alrededor de las 12:30 comenzó una gran eclosión de todo tipo de insectos, a los plecópteros que nos acompañaron durante todo el día se unieron tricópteros y una gran eclosión de Ecdyonurus similar a la que pudimos presenciar el año pasado en el Porma. Al contrario de ese día, aquí provocó una actividad brutal de las truchas en las zonas rápidas. Tomaban la ninfa al primer momento de contacto con el agua, a medio derivar e incluso aguas abajo en el momento de recoger el hilo.

Fueron un par de horas en las que pudimos disfrutar mucho en apenas 60 m de río pero poco a poco la actividad fue cayendo en picado junto con la presencia de insectos, el hambre aparecía y nos fuimos a comer sobre las 15:00.

Estos grandes plecópteros (Dinocras cephalotes) nos acompañaron en gran cantidad a lo largo de todo el día.

Junto con los Ecdyonurus también aparecieron en las horas centrales algunos pardones como este Epeorus (subimago hembra).

También aparecieron a primera hora ejemplares de Paraleptophlebia submarginata (imago hembra), pero en muy escasa cantidad.

Comiendo a pie de río observamos como varias truchas empezaban a cebarse en una zona de aguas lentas así que fue terminar de comer e ir directos a por ellas. Incluso entrando con todo el cuidado del mundo lo tuvimos prácticamente imposible: lances largos con una pequeña emergente en cdc, que todavía estoy intentando adivinar si me subió a mi o otra cosa que bajaba al lado... Esa fue la opción que tuve ya que no volverían a hacer acto de presencia.

Un poco más arriba en otra tabla, Jesús estaba detrás de una trucha maja que se cebaba junto a la orilla, tuvo un poco más de "suerte" que yo ya que la consiguió clavar pero se llevó el barón rojo... 

Estaba muy difícil hacer nada en este tipo de aguas además la actividad era prácticamente cero y las pocas que se cebaban casi nunca repetían. Decidimos entonces recoger, para nosotros la jornada fue muy satisfactoria y la verdad es que nos fuimos contentos del río.