Hacía mucho que no pescaba el río Arlanzón. Pese a su cercanía, es un río al que no solemos ir demasiado, generalmente tentados por otros ríos de mayor porte, pero en esta ocasión me apetecía echar un rato de principios de junio en esas aguas.
La verdad es que me encontré un río bastante corto de agua y muy cerrado, muy poco andado y en muchos tramos comido por la vegetación. Tenía en el recuerdo un par de buenas zonas accesibles y abiertas para pescar a mosca y a ellas me dirigí.
Era media mañana cuando comencé a pescar, el sol ya empezaba a golpear con fuerza y las sombras se agradecían. Até un parachute rojizo en un 16 y escudriñé todo los recovecos que lasvegetación y mi técnica me permitían. Las nobles truchas no tardaron en sucumbir a tan suculento bocado en un ambiente en el que la presencia de mosca era prácticamente inexistente.
Una pena no poder aprovechar bien el río ya que es realmente divertido pescarlo al agua. Donde tu intuición te dice que puede haber una trucha la hay, y si además están dispuestas en esas bonitas posturas colocar la mosca se convierten en un divertido reto para el mosquero.
Río maltratado al máximo por mucha naturalización que vendan a su paso por Burgos.
ResponderEliminarLa falta de riadas estacionales que limpien de maleza las orillas está permitiendo que se pierda el cauce y haciendo imposible ya no la pesca si no la supervivencia de sus moradores.
Como pescador me escandaliza que se sigan vendiendo pases a cotos impenetrables pero como ciudadano me hincha varios apéndices de mi cuerpo que un río sea entregado a una confederación para que lo usé única y exclusivamente para producir kilovatios a base de destrozarlo sistemáticamente.
Y no es el único,el 99% de los ríos regulados están en la misma o peor situación.
Toda la razón en lo que dices. El río estaba absolutamente inaccesible en el 90% del tramo, la CHD se ha cargado el río en 5 años. Una pena...
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